jueves, 3 de marzo de 2016

Observa, analiza y actúa II

Buenas días a todos,

Primero de todo pediros disculpas por el gran abandono del blog, pero no me sentía con ganas de seguir, así que opté por dejarlo completamente aparatado; hoy en día me encuentro con muchas más ganas y espero que no se pierda esta costumbre.

Hoy escribo esta pequeña entrada, que la tengo pendiente desde hace poco menos de un año, para hablaros de mi opinión personal acerca de diagnóstico en vuestros peludos, ¿os animáis a seguir leyendo?


Hace tiempo os conté que a mi gordo le habían diagnosticado una cardiopatía dilatada, la cual iba empeorando en cuestión de meses, y no era más que un bebé, 11 meses, ahora tiene 3 años. Podéis leer la entrada pinchando aquí donde os cuento un poquito qué pasó.

Bien, yo notaba que Eros se fatigaba muchísimo y optamos por una ecografía donde se nos dijo que algo no marchaba bien. Empezaron a tratarlo pero el perro seguía igual, al tiempo, con otro nuevo control, me dijeron que había empeorado, tras medicarlo más aún (vetmedín + carnicor) y después de calmarme (pues imaginaos cómo estaba), decidí pedir una segunda opinión.

El primer diagnóstico fue en mi clínica de siempre, pero la ecografista era una muchacha que venía de propio a hacer esas pruebas, yo confiaba en mi veterinaria pero en algo tan "gordo" no quería quedarme con ese único resultado.

¿Por qué opté por una segunda opinión? Primero porque consideraba que era algo lo suficientemente importante como para no conocer el diagnóstico de otros expertos, y segundo, y más determinante, porque yo veía que con la medicación él seguía exactamente igual, por lo que algo no me cuadraba.

Decidí llevarlo a la facultad de veterinaria de Zaragoza donde cuentan con absolutamente todo tipo de especiaslistas y que tiene una fama (muy merecida) en toda España. La consulta con el cardiólogo me encantó, su primera impresión fue "este perro no tiene nada en el corazón" nada más verlo, sí lo que leéis. Como Eros es ENORME (no está en el estándar de la raza de Golden Retriever) y le veían la cabeza muy grande (sí, señores, tiene un cabezón considerable), hicieron análisis para la tiroides y electros.

A los 15 días fui a hacerle la ecocardiografía. Me dieron los resultados y tras una hora y pico larga me devolvieron a mi gordito, entonces me dijeron que no tenía nada, que le habían mirado también los pulmones con radiografías (no sabía nada), más electros, y que no encontraban nada, que del corazón estaba sano como un roble, (sí, está mal que lo diga pero no paraba de temblar pensando en la sablada que me iban a meter y para nada, no me cobraron mas que la eco, ni la consulta, radiografías, electros...). Me mandaron retirar la medicación inmediatamente y vida normal, pues me habían recomendado que paseos pequeños y pocos esfuerzos.

Vida tranquila ¿yo?

Yo llegué a mi casa más contenta que unas castañuelas, y decidimos no decirle nada a mi veterinaria de cabecera (mal por nuestra parte). Al tiempo, se nos escapó este dato, y nos dijo que por favor le lleváramos todos los informes, y que había que ir a un tercer diagnóstico.

Bien, al tiempo fuimos a una consulta con un especialista de renombre (investigador de la leishmania) llamado Pablo Gómez Ochoa. Primero de todo decir que trató a Eros y a nosotros con un cariño increíble, y que lo miró de arriba a abajo para llegar al tercer diagnóstico: ESTÁ SANO COMO UN ROBLE.

Con todo esto, no quiero decir que desconfiéis de vuestros veterinarios porque sí, pero creo que ante determinados diagnósticos graves, se debe acudir siempre a una segunda o incluso tercera opinión. Nosotros medicamos inútilmente a Eros un año y pico por no hablaros del desembolso económico que nos dejamos (60€ mensuales de medicación más consultas veterinarias, pruebas...) y por supuesto, la peor parte, el disgusto emocional que nos llevamos con todo este asunto porque era duro asimilar ese diagnóstico siendo tan pequeñito.

Creo que os debía este post, porque igual que se comparte lo malo, se ha de compartir lo bueno, y sobre todo, recalcar, que no os fiéis únicamente de un especialista, por desgracia, y cada día lo veo más hay veterinarios que intentan sacar mucho dinero por encima de lo que realmente es bueno para los peludos, así que por favor, contrastar diagnósticos.

Esto es todo por hoy, breve y conciso, espero que os haya servido mi experiencia.

Sano y fuerte

Dato: este último especialista, precursor del leishguard y experto en cardiopatías, nos contó que hay un error grandísimo en cuanto a veterinarios no especializados y es que cuentan con un rango de valores iguales para todos los perros y que llevan tiempo estudiando que no es así, que en función de las razas varía bastante, que el Golden Retriever es una raza que está por debajo de la media en cuanto a esos valores. Que poco a poco están sacando los estudios por cada una de las razas.

Así que tomad nota y pensad siempre en el bien de vuestro peludo.

Nota: no me pagan nada por hablar tanto de la facultad de veterinaria de Zaragoza como de Pablo Gómez Ochoa, pero creo que es de recibo contar las cosas como son o cómo yo las he vivido.


¿Alguien ha vivido algo así?
¿Qué os parece nuestra historia?

5 comentarios:

  1. Me ha encantado la entrada y tu blog. Vienen muy bien estos consejos para los que amamos a los animales y tenemos a nuestros compañeros peludos como si de niños se tratarán. Un beso y sigue escribiendo que me encanta leerte!

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    1. Muchas gracias por tu comentario! No pretendo sentar jurisprudencia ni de lejos, pero creo que compartir momentos como este o zonas para ir con nuestros peludos no está de más, y así crear entre todos una comunidad bonita.
      Buenas noches

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  2. Acabo de leerlo! No sabía nada de todo esto. Uf, no me quiero ni imaginar como lo pasasteis la verdad. Menos mal que todo quedó en una historia para contar... Pobre eros! A Nolan le tuvimos que operar de urgencia con 4 meses, no contábamos con el,a mi se me vino el mundo encima. Pero otro que ya, sano y fuerte :) un besazo

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    1. Buenas noches Rebece.
      Primero agradecerte tu tiempo para escribir. Y sí, lo pasamos fatal porque los enfermos de cardiopatías se les acorta la vida bastante, pero al menos quedo en eso, anécdota, desagradable, pero anécdota. La cuestión es que tenemos a nuestros bichitos con nosotros y es lo único que cuenta, ¿Nolan quedó bien de la operación? Espero que sí.
      Lametones!

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Muchas gracias por tu comentario.
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Besos

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